Lata es lo que tengo ahora. Algunos lo ocupan para definir verguenza. O rabia. Pero yo solo para aburrimiento. Que no me pasa nunca. Excepto ahora que en todo un día he atendido 5 pacientes (y no me estoy quejando). Me daban ganas de escribir, pero no quería repetir nuevamente lo extenueda que estoy. Lo nuevo es...
- Disfruté manejando la moto. En serio. algo aprendi de ese monstruo de 160 kgs que me compré y es que hay que aprender a usar la inercia. Mis respetos a Don Luis González que me enseñó lo más importante de una moto: La moto se maneja con el poto. Después de eso, tomar las curvas fue más fácil. No hay mayor placer que tomar bien una curva, excepto bajar una cuesta con el puro vuelito, mientras atardece. El último día que anduve en moto, casi maté a la perra del Alexis y casi choqué la casa. Y me eché el espejo izquierdo. De ahí que tengo miedo de manejar. Porquería de perro que se tiene que andar cruzando.
- Bailé arabe en un restaurant: El rancho del roble. Cuando llegué acá-hace 7 meses- todos se reían de mi idea. Ayer fue una realidad. El público ni pestañeó. Fui con mi profe y una compañera. Estuvo de lujo. Un sueño más tickado en la lista. Afírmate Calbuco y Casino Pto Varas!!!
Proximamente mas noticias...me esperan mis famosas galletas de jengibre para ser cocinadas. (no deje de revisar en mi perfil el link a "cocinando con")
