El mundo es un reloj: tiene tuercas y engranajes, que funcionan en perfecta sincronía. En el corazón tiene esos rubíes, que pueden ser 17 o 21 o cualquier número, pero que nadie ve. Como todo reloj, este mundo es imparable, exacto y no hay caso de querer atornillar al revés, te come la máquina.
A veces, cuando una pieza se va haciendo vieja o ya no funciona como antes...las otras se preparan para ver cómo van a trabajar cuando su compañera no esté.
Distinto es cuando una tuerca que no tenía porque irse se va del mundo. El reloj entero está obligado a cambiar en un segundo-esto no estaba planificado!, cómo es posible que pasen estas cosas!, no lo sé señor, no lo sé-y entonces, todo lo que iba a ser, ya no fue, y se reordena la vida.
Y el reloj sigue funcionando...se atrasó solo un segundo...pero lo que nadie sabe es que NO está funcionando como antes
Lo que iba a pasar ya no pasará, nada será igual.
Y hay que conformarse con el nuevo ordenamiento de las cosas.
Por eso me llamaste.
Por eso vamos a juntarnos a hablar. Y esto también será como perder un engranaje. O ir al relojero para arreglarnos...
Es increíble como unas cosas desencadenan otras.
Y cambian tu vida.
Vamos a ver que pasa.
2 comentarios:
Suerte
excelente vision de la vida!!!! ...
aprovecho la incursion para desearte un bello y prospero año nuevo y unas muy felices navidades (con algo de atraso)
besos
Publicar un comentario